lunes, 21 de abril de 2014

¡Mi osteópata me trabaja la cabeza!

¿A que suena raro? El cráneo... esa bola dura e inerte, cuya única función parece ser la de “tapar” el cerebro… Aunque no lo parezca, el cráneo se relaciona con muchos problemas tanto a nivel local como a un nivel más alejado. ¿Cómo? Como siempre, voy a intentar resumir por qué trabajamos sobre el cráneo en pocas palabras… ¡Ardua tarea, todo hay que decirlo! ¡Vamos allá!



Photo credit: pedrojperez from morguefile.com



En primer lugar, como siempre, un poco de anatomía simplificada

Haciendo un resumen muy resumido, el cráneo es como una caja ósea que contiene parte del sistema nervioso central (cerebro, cerebelo, tronco cerebral), así como los órganos de los sentidos (vista, oído, gusto, olfato y tacto). Éste se encuentra tapizado en su interior por las meninges (las membranas que envuelven y protegen la médula espinal y el cerebro) y, en su exterior, por músculos y fascias.

A pesar de que parece un único hueso, en realidad es como un puzzle formado por 22 huesos unidos entre sí mediante diferentes articulaciones: las suturas. Estas suturas permiten una mínima capacidad de movimiento entre los huesos, indispensable para que el cráneo pueda desarrollar sus funciones correctamente. De hecho, posee un movimiento permanente, como si fuese una pelota que se infla y se desinfla de forma rítmica.

¿Por qué razones es importante mantener el cráneo libre de tensiones?

Siguiendo la máxima de la Osteopatía de que para que exista salud las estructuras del cuerpo deben conservar su libertad de movimiento, es importante mantener el cráneo libre de tensiones para que su movilidad sea buena y, por lo tanto, las funciones de las estructuras que de él dependen puedan realizarse de forma correcta. Entre los problemas que nos pueden llevar a pensar en el cráneo, nos encontramos:

-Endocrinos: dentro del cráneo se encuentra la hipófisis, fábrica central y coordinadora por excelencia de nuestro sistema hormonal. El conducto por el que salen las hormonas generadas en esta glándula se encuentra rodeado por las meninges. Cuando estas están tensas, pueden comprimir este conducto, impidiendo que las hormonas salgan hacia el torrente sanguíneo y, de ahí, a los órganos sobre los que tienen que actuar.

-Digestivos: el nervio vago, encargado de mantener un correcto funcionamiento de prácticamente todo el sistema digestivo, pasa a través de un agujero que se encuentra en la base del cráneo. Cuando en los alrededores de esta hendidura hay tensiones, se puede comprimir el nervio, alterando así su capacidad reguladora del sistema digestivo.

-Dolor: evidentemente, donde hay tensión, el dolor está casi asegurado: cefaleas, migrañas, dolores cervicales altos… son algunas de las posibles consecuencias de un problema craneal.

-Otros: mala oclusión dental, mareos, tinnitus, problemas visuales, sinusitis crónica, depresiones, falta de concentración, latigazos cervicales, escoliosis, insomnio…

¿Qué hacen los osteópatas cuando trabajan sobre el cráneo?

Como siempre, si llegamos a la conclusión de que hay que actuar sobre el cráneo después de una exhaustiva exploración general, nuestro objetivo será el de eliminar los frenos que impiden que se pueda mover correctamente. Para ello, en función del tejido responsable de esta disfunción, podemos actuar sobre las meninges, las fascias que cubren el cráneo en su exterior, las suturas (para relajar los tejidos que las unen y, por lo tanto, liberar su movilidad),…

Al relajar estas estructuras, conseguimos eliminar las compresiones que puedan estar ejerciendo sobre arterias, venas, nervios...y, a través de ello, aportarle al organismo un terreno en el que pueda ejercer sus funciones con mayor eficacia.

En el tratamiento del cráneo, tendremos también presente la necesidad de liberar las restricciones que se encuentren a nivel de la columna y del sacro. Esto es porque las meninges se extienden desde el cráneo, a lo largo de todo el interior de la columna, para terminar el sacro. Cualquier limitación de movimiento o adherencia a estos niveles tendrá repercusiones, a través de estas membranas, sobre el cráneo. De la misma forma, cuando se liberan las restricciones del cráneo, se puede tener efecto sobre las tensiones de la columna y del sacro.

Esperando ser de ayuda,
aldaoregueira

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